Towfiqu Barbhuiya. (s. f.). Close up of Man’s Hand Putting Card in Box with Slot [Fotografía]. Canva. https://www.canva.com/photos/MAEKrA5Un8c-close-up-of-man-s-hand-putting-card-in-box-with-slot-/
El 15 de septiembre de cada año se conmemora el día internacional de la democracia, la celebración de este día se formalizó el 8 de noviembre de 2007, después de que la fecha fuera fijada mediante la resolución A/RES/62/7 emitida por la Asamblea General de las Naciones Unidas, dicha celebración se materializó al año siguiente, siendo el 15 de septiembre de 2008, la primera vez que fue conmemorada esta celebración.
Es muy importante resaltar la importancia que tiene la democracia en la vida de todos los seres humanos, ya que es una parte fundamental para poder constituir la estructura de un Estado próspero, y que además garantice los derechos fundamentales de los miembros que forman parte del Estado.
Pero, ¿qué es la democracia? el vocablo democracia viene del latín “democratia” y este a su vez toma su origen del griego “demokratia”, compuesto por las palabras “dêmos”, cuya traducción es pueblo, y “krateîn” que se traduce como gobernar, por lo que al juntar ambos vocablos se puede entender como “el pueblo gobierna” o “el gobierno del pueblo”, siendo así la democracia una forma de gobierno en la cual, son las personas —el pueblo —, que constituyen un Estado quienes tienen la capacidad de gobernar el mismo Estado, es decir, de tomar las decisiones que repercuten en el mismo, caso contrario al de una monarquía por ejemplo, en la cual dicha toma de decisiones recae en una sola persona, el Rey.
Claramente al ser muchas personas las que componen a un Estado, resultaría casi imposible que todos llegasen a un acuerdo por sí mismos, por lo cual es necesario que la toma de decisiones se lleve a cabo mediante mecanismos de participación de los ciudadanos en condiciones de igualdad y libertad, por lo que es necesario contar con representantes que estén legitimados para poder externar las opiniones de los ciudadanos.
Por lo que, podríamos decir que una democracia auténtica consistiría en la fiel representación de los intereses de los ciudadanos a través de sus representantes en la toma de decisiones del Estado, por lo que dichos representantes no deberían actuar conforme a intereses propios o en beneficio de ellos y su círculo, —caso que es bastante común en varios Estados actualmente —, sino que deberían abocarse a escuchar las exigencias y necesidades de quienes los eligen como representantes, puesto que de otra forma serían todo menos representantes.
De ahí la importancia de que los ciudadanos estén bien informados a la hora de escoger a sus representantes, ya que conociendo los perfiles y propuestas de los representantes, los ciudadanos podrán escoger aquellos candidatos que compartan y representen valores, ideales, convicciones, intereses afines, puesto que en teoría así ambos lograrían cumplir sus fines u objetivos.
Por el contrario, si los ciudadanos no están bien informados, o no conocen a los candidatos que se postulan para poder ser sus representantes, no hay manera de construir una democracia auténtica, puesto que así no son los gobernados quienes gobiernan, ya que al elegir a representantes que no representan sus intereses, o que no están interesados en cumplir sus exigencias, no ejecutan su facultad de gobernar, sino que dan rienda suelta a que sus representantes actúen sin la necesidad de tener que dar resultados a los gobernados, puesto que los mismos gobernados desconocen el poder de su voto, mismo poder que es otorgado por la Constitución de los países que se constituyen con la forma de gobierno de una democracia, o que dicen serlo.
En el caso específico del Estado mexicano podemos encontrar en el artículo 39 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el fundamento legal que confirma que el poder público emana directamente del pueblo mexicano, por lo que resulta pertinente transcribir dicho artículo a continuación:
“Artículo 39. La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.”
(Énfasis añadido)
Es importante resaltar que la redacción de dicho artículo se encuentra intacto desde la entrada en vigor de esta Constitución, es decir, que desde el 5 de febrero de 1917, este artículo no ha sido modificado en absoluto, lo cual hace sentido si tomamos en cuenta que en parte dicho artículo fue uno de los objetivos que dio origen a la Revolución mexicana, además de ser un pilar que mantuvo vivo el movimiento revolucionario.
Por otra parte, en el artículo 40 de nuestra Constitución podemos encontrar el fundamento legal que establece la forma de gobierno en nuestro país, mismo que también será transcrito a continuación a fin de que nuestros lectores se encuentren bien informados sobre nuestra forma de gobierno:
“Artículo 40. Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica y federal, compuesta por Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, y por la Ciudad de México, unidos en una federación establecida según los principios de esta ley fundamental.”
(Énfasis añadido).
Como se mencionó anteriormente, el poder que la propia Constitución otorga al pueblo para poder ejercer esas facultades de gobernar debe seguir ciertos mecanismos para tener un control dentro del Estado, por lo que es necesario contar con representantes que externen las necesidades y exigencias del pueblo que es gobernado, lo cual confirma lo expuesto al inicio del presente artículo, que es, que la democracia juega un papel importante en la vida de los seres humanos, ya que como vimos a lo largo del artículo, sin democracia no podríamos tomar las decisiones que van a repercutir en la vida de todos los ciudadanos que conforman un Estado.
Por otra parte, es necesario resaltar el hecho de que muchas personas coinciden en que muchos de los representantes a lo largo de la historia, no cumplen con su función principal, entregando al pueblo resultados negativos, provocando un disgusto en los ciudadanos, lo cual es un indicador que confirma que la ciudadanía mexicana no participa de forma eficiente en la democracia del país, a pesar de que como vimos anteriormente somos los ciudadanos quienes tenemos el poder de gobernar nuestro país.
Por todo lo expuesto anteriormente, el equipo de SuAbogado incita a todos los ciudadanos a informarse de manera adecuada sobre quienes son las personas que buscan ser nuestros representantes, así como sus valores, trayectoria, principios, objetivos, etcétera, para poder ejercer un voto responsable, pero sobre todo un voto útil, no obstante, el voto no es la única forma de participar en la democracia, ya que los mismos ciudadanos son quienes pueden ser candidatos a ser representantes, por lo que si no se está de acuerdo con los partidos políticos ya existentes, la propia Constitución permite formar nuevos partidos, con nuevos representantes que pudieran llegar a llamar la atención de nuevos votantes.
-“Como gobernados no tenemos nada más importante ni nada más valioso que el voto, por lo cual, es nuestra obligación usarlo con sabiduría, el poder está en nosotros”-
Alfredo Hidalgo Saavedra.
Alfredo H. S.
Fuentes de consulta:
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos [const] Artículos 39 y 40. 5 de febrero de 1917 (México).
Día Internacional de la Democracia | Comisión Nacional de los Derechos Humanos – México. (s. f.). CNDH México. Recuperado 30 de agosto de 2022, de https://www.cndh.org.mx/noticia/dia-internacional-de-la-democracia#:%7E:text=En%20ese%20sentido%2C%20la%20celebraci%C3%B3n,y%20los%20individuos%5B2%5D.
United Nations. (s. f.-a). Día Internacional de la Democracia | Naciones Unidas. Recuperado 30 de agosto de 2022, de https://www.un.org/es/observances/democracy-day